martes, 8 de mayo de 2012

RELATO CONCURSO PAPERBLANKS - AZAR

                                                                                AZAR

                    El az-zahr iba subiendo, girando, a cámara lenta, mientras se veían los diferentes puntos, uno, dos ,tres, pasando por delante de los ojos, de repente se para, queda suspendido en el espacio un tiempo y empieza a caer, primero despacio y de repente cada vez  más deprisa.......
                   ¿Quién inició este juego? ¿Quién encontró este dado? ¿ Quién decidió que la que sacara, 6, entraría en estas ruinas?
                   El dado rebotó en la piedra y como si adquiriera una vitalidad que no tenía, empezó a ir de un sitio a otro hasta que cayó al suelo y quedó el 6 hacia arriba.
                   Joanna, que había elegido ese número, entre risas y empujones entró por la puerta de esas ruinas, que entre las brumas del valle, despedían un olor a humedad y a vegetales en descomposición, que producía un cierto desasosiego.
                   Las otras cinco amigas, jugando y persiguiéndose entre los matorrales, no se dieron cuenta que el tiempo pasaba. Decidieron volver a tirar el dado repartiendo otra vez los números, salió otra vez el 6.
                   Jeftzibá , que ahora estaba contenta porque había elegido su número preferido y que hacía favor a su nombre, que en su idioma significa”mi deleite está en mí”, corrió hacia la entrada y desapareció en la oscuridad.
                  El  día transcurría y en las ruinas no se oía nada, decidieron sortear otra vez, el dado en el aire y al caer empezó a rebotar, menos mal que  Jezabel aproximando las manos lo frenó y salió 6.
                
  Jemima, ya no tan contenta, se aproximó a la puerta desvencijada y asomán-
dose  gritó y gritó sin obtener respuesta. Decidida, empezó a caminar hasta ir desapare-
ciendo en la oscuridad. Su nombre “paloma” la daría alas para ir a salvar a sus amigas de juegos.
                   Otra vez, el tiempo pasa y no sabemos nada de las que han entrado. Sortean de nuevo y el az-zahr repiquetea en el suelo, sale el 6. Jezabel, te toca a ti.
                   Javilá y Judith, se enfadan porque es su amiga la que tiene que ir, si tu pre-
tendiente es el rey Acab de Israel lo sentimos, pero hoy tu deber, es entrar en las ruinas
y ver lo que ha pasado con nuestras compañeras.
                  Jezabel se sienta en el suelo, se abraza las piernas y no contesta a sus amigas, las cuales en vista de ello deciden penetrar juntas y despacio, con miedo y  llamándolas a voz en cuello, desaparecen en la oscuridad. De repente, un movimiento de tierras y del follaje y desaparecen las ruinas entre un estruendo impresionante.
                 Jezabel, se levanta, saca de entre su túnica una cajita e introduce en ella con sumo cuidado el az-zahr, envolviéndolo con el terciopelo que le dió la guardiana  Tanit, embajadora del Dios Baal-Hammon. Ahora ya, libre de mis damas protectoras, podrá casarse con Acab rey de Israel  y cambiar el curso de la historia.
                 Caminando por el valle en sombras, las oscuras presencias se separan a su paso y la protejen y a la salida, una piedra grabada ,en el suelo, cubierta de hojarasca pone azahar. El primer significado de la palabra azahar fue flor y luego suerte y de ahí fue derivando az-zahr hasta azar por un lado y por otro azahar, palabras preciosas.
                Joanna, Jeftzibá, Jemima, Javilá y Judith no tuvieron suerte y encontraron la muerte donde esperaban juego. No siempre acertar es lo mejor.
                 En los juegos de dados el azar es el que tiene los puntos que hace perder el juego. Puede ser la fortuna y también la desgracia. Como en todo.

lunes, 7 de mayo de 2012

I CONCURSO INTERNACIONAL DE RELATOS BREVES "SONRISA DE QUEVEDO " SOBRE HUMOR EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA - ESPAÑA - 2012 - EROTIC MASSAGE GEL

                                                       EROTIC MASSAGE GEL”.




Cuando me llamó mi jefe de la Consejería de Economía y Consumo de la Comunidad de Madrid, no pensé que el encargo de testar el gel me lo fuera a encargar a mí.
Aduje mis 60 años, mis achaques y que me quedaba muy poco para jubilarme, pero no hubo manera. Conseguí de todas maneras que los resultados no se los entregara a la vuelta del fin de semana y me dio un mes, pues además eran tres tipos diferentes de geles y eso requeriría mayor dedicación y esfuerzo.
Hay que recortar gastos, pero esto me parece un poco exagerado.

Me entregó una bolsa grande con tres kits, uno de fresa con champaña, otro de fruta exótica y otro de melón y mango.
En la bolsa por fuera ponía “el conejo feliz”, con un dibujillo engañoso y la gente en el metro me miraba y cuchicheaban, algunos intentaban asomarse al interior para curiosear.
Al salir del metro y encaminarme hacia casa iba pensando como abordar a mi parienta e intentar explicarla lo que teníamos que probar. No se lo va a creer y encima me va a llamar guarro.
Según entré, me dirigí a la mesa camilla, vacié la bolsa y me senté en el orejero a la espera, oí un “hola cariño” y yo no dije nada.
Vino desde la cocina, cogió una caja, me miró y se sentó enfrente. Daba vueltas a la caja en el sentido de las agujas del reloj y a la inversa y otra vez y otra.

Se lo conté tres veces y no se lo podía creer. Cuando la dije que me iban a pagar horas extras cambió un poco la expresión pero no mucho.
No la entendí algo que dijo sobre Esperanza pero tampoco pregunté y entonces cogió el calendario de los que escriben con el pié y me dijo que este fin de semana no teníamos a la nietecilla y que el hijo que vive en casa, estudiante de Derecho, iba a esquiar.
Ya teníamos fecha, noté un pálpito y menos mal que tenía puesta la falda de la camilla por encima, pues algo se notaba.
Decidimos hacerlo primero con la caja de melón y mango, el día, el viernes cuando se fuera nuestro hijo y guardamos todo debajo de la cama.
Esa semana se me hizo larga, cuando me cruzaba con mi mujer por el pasillo nos tocábamos y nos reíamos y en el trabajo el jefe me preguntaba todos los días que qué tal, que si ya lo habíamos hecho.
Llegó el día y le llevé un ramo de flores y unos bombones, mi hijo se fue desde el trabajo y nos quedamos solos en la casa, cerramos la puerta y pusimos una silla en el pomo.

Abrimos la caja y dentro había un sobre como con una solución espesa y una especie de sábana impermeable grande de 160 cm x 228 cm que como luego leímos teníamos que colocar encima de la cama.
Pusimos a calentar agua en la olla, pues con el sobre al diluirlo había que hacer cuatro litros de gel con el que luego nos embadurnaríamos y nos echaríamos encima de la sábana.
Mientras mi mujer daba vueltas con la cuchara de madera, yo por detrás me arrimaba y ella hacía como que me huía, pero yo creo que la gustaba.
Cuando la consistencia parecía la adecuada y entre los dos la llevábamos hacia el dormitorio, entonces tropecé con la alfombra y cayó todo a lo largo del pasillo, nos costó cinco toallas y seis paquetes de papel de cocina absorber todo el gel.
Metidos en harina y con la curiosidad en un punto álgido y no me refiero a lo mío, abrimos la caja de fresa y champaña y con más cuidado hicimos todo el proceso otra vez y lo llevamos al dormitorio.

Pusimos la sábana por encima y nos desnudamos, nos echamos y la sensación era que se nos iban a quedar las letras del ahorramás en el culo pegadas.
Cogí la olla y la volqué sobre los dos, el gel estaba un poco caliente y nos empezamos a restregar y embadurnar con ganas.
La sensación era agradable y entre unas cosas y otras empezamos a animarnos e intentar algunas posturas que teníamos casi olvidadas, con tanto magreo y toqueteo parecíamos estar en un tobogán e íbamos de un borde de la cama al otro, consiguiendo a duras penas mantenernos encima.

Mientras nos agarrábamos para no caernos recordaba lo que ponía el prospecto, experiencia sensual y placentera, completa ingravidez, sin esfuerzo y movimientos deslizantes.
Veía la cara de terror de mi mujer, yo conseguí meter la uña del dedo gordo en la sábana y frené mi caída, pero ella se agarró a donde no debía y me la dobló, pero no logró parar y se empotró con la tele de plasma que cayó con estrépito, su dentadura partida rebotó y fue al orinal.
Mi grito no fue humano y al mirar hacia mi cosita vi como crecía hasta parecer una berenjena, mientras por el roto de la sábana se extendía el gel por toda la habitación y desaparecía por el pasillo.

Mi mujer se subió a la cama, me abrazó y nos echamos a llorar y en ese momento oímos un ruido fuerte de la puerta, pasos apresurados por el pasillo y un “papá, mamá, no hay nieve”.

domingo, 6 de mayo de 2012

I CONCURSO DE RELATOS CEREZA DEL JERTE - ESPAÑA - 2012 - HANAMI

                                                                         HANAMI


Siempre he sido un amante de la tradición japonesa, pero observar la belleza de las flores de los cerezos sin más, Hanami, es decir, sin esperar que esa floración de lugar a unas buenas picotas es como un jardín sin flores, como el sexo sin amor o el amor sin sexo.

A mí me gusta el cerezo en flor, pero estoy deseando  poder comer esas picotas crujientes y carnosas.
Los japoneses acuden en masa a parques y jardines realizando un picnic con la familia o con la empresa a contemplar sus flores (Sakura ), de Okinawa a la isla de Hokkaidõ.

Nosotros también acudimos al valle del Jerte para ver los cerezos en flor, pero no con la empresa, sí con la familia, y a comer en tantos y tantos sitios desde el Torno hasta Plasencia, mi lugar de nacimiento. Para no olvidar los atascos, a los que venimos de Madrid nos encanta el puente de Cabezuela.

El pronóstico de florecimiento el sakurazensen, en España es el boca a boca, todos sabemos el día exacto.
En las variedades ornamentales, los estambres están cambiados por pétalos adicionales, así que no dan frutos, están locos estos japoneses, que les den.


sábado, 5 de mayo de 2012

CONCURSO RELATO ERÓTICO 2012 - RETALES LITERARIOS - PRIAPISMO

                                                                                   PRIAPISMO



Señor Juez, escribo esta carta para exonerar a cualquiera de mi muerte, pues estoy en plenas facultades tanto físicas como mentales y soy el único responsable, bueno el único no, la culpa la tiene también la erección permanente que tengo desde hace quince días y que no me deja descansar.
Estoy casado desde hace 50 años con la misma mujer y nunca he mirado a otra.

Todo empezó hace dos semanas en unos grandes almacenes, me estaba atendiendo una señorita de buen ver, cuando de repente tuve una lipotimia, caí al suelo y perdí el conocimiento.
 Noté una boca en la mía y abrí los ojos, era ella que me hacía la respiración artificial y noté una erección descomunal que yo ya no recordaba. Se levantó rauda y asustada y me di cuenta que lo que me había pasado era que se me había bajado toda la sangre al pene y se me quedó el cerebro sin oxígeno, es decir una Cipotimia.

Me llevaron al botiquín, yo disimulando y tapándome con el abrigo y el médico me dijo que estaba sufriendo un ataque de priapismo y que debía consultar con el especialista lo antes posible.
Yo en el fondo estaba orgulloso de mi erección, ya que últimamente no me pasa y decidí hacer el amor con mi mujer, en el autobús la gente me miraba con terror y se apartaban, pero a mi no me importaba.

Entré en casa, silbé y me dirigí hacia la cocina, estaba ella con su delantal cocinando una besamel, moviendo el culo, así que me coloqué detrás y me pegué a ella, dio un grito, derramó la sartén y al volverse se llevó la mano a la cara.
La conté lo que me había pasado y que teníamos que aprovecharlo, así que nos fuimos al dormitorio y encima de la colcha de ganchillo empezamos dale que te pego.
A la hora yo tenía calambres en las piernas, una irritación en el pito de tanto frotar y mi mujer también estaba irritada pero conmigo y me decía que la dejara en paz de una vez, que no tenía el coño para ruidos.
Eso no se bajaba ni a la de tres y me empezó a doler, al principio suave, pero al rato insoportable.

En el baño y ante el espejo me miraba y remiraba, me ponía de perfil y a punto estuve de hacerme una foto.
Por la noche no pude ponerme el pijama y la sábana me molestaba al rozarme y no me podía dormir a pesar de los tres orfidales que me había tomado. Casi amaneciendo fue cuando me quedé traspuesto un rato.
Por la mañana seguía igual y me molestaba todo tipo de ropa. Mi señora no quería mirarme y me rehuía.
Me embutí en la ropa más holgada que tenía y me fui a mi urólogo del seguro. Por el camino iba levantando pasiones y rechazos en igual cantidad.
Al entrar en la consulta me recibió una doctora con tres féminas aprendices y dos enfermeras, yo dije tierra trágame y sin más dejé que se deslizara el pantalón al suelo, quedándome con el pito inhiesto de frente a ellas.
Me hubiera encantado tener una cámara de fotos en ese momento para haber plasmado las seis caras  a la vez, de estupefacción y de asombro.
Se acercaron ávidas y empezaron a toquetearme, algunas al unísono. Una de ellas tomó una jeringa grande con una aguja que parecía un trocar y comentó que había que pinchar para extravasar la sangre acumulada.
Las empujé de malos modos, me subí el pantalón rápidamente y salí al pasillo y según iba corriendo los gritos aumentaban, pues con la premura la llevaba fuera.
Conseguí meterla dentro no sin dificultad, pero aunque algunos hombres me seguían a distancia, pude escapar.
Mi mujer ya no me quiere, dice que soy un sátiro y que por favor la deje en paz. Me duele mucho lo que me dice y también el pito, pero ni con hielo se me baja.

No salgo de casa para nada, la asistenta se nos ha despedido y mis hijos y nietos han dejado de visitarnos.
Lo peor ha sucedido esta mañana cuando mi mujer se ha ido a casa de su hija con una maleta y me ha dejado una nota diciendo que hasta que eso no vuelva a su ser, ella tampoco volverá.
He decidido ahorcarme pero si ya estoy como estoy, no sé que puede pasarme, pues dicen que a los que mueren así, lo hacen con una erección brutal.
Pido perdón a mi familia y a usted señor Juez y quiero que me entierren con un poco de holgura en mis partes que ya estoy harto de sufrir.

jueves, 3 de mayo de 2012

2ª EDICIÓN "ESTA NOCHE TE CUENTO" - 2012 - ....solo SEXO

                                                                   ...........solo SEXO



Cuando entré en el Niko’s Club, ya conocía de referencias esta barra americana. Me habían hablado  muy bien del local y de sus chicas.
No sabía dónde ir y no era cuestión de ir a ligar a una cafetería tomando tortitas con nata y sirope.

Me gustó la decoración y la luminosidad rojiza, me acerqué a la barra, me acodé, sentándome en un taburete y me pedí un wisky. Al momento, una joven, guapa, con rasgos orientales se me colocó entre las rodillas y con voz sensual me dijo que si la invitaba a algo, asentí y se pidió un benjamín.

A la segunda copa ya nos habíamos contado nuestros desamores y en la pista sonaba una música lenta “manda rosas a Sandra”.
 Bailamos muy pegados y durante mucho rato, con nuestras caras muy juntas. Nos besamos. Yo ya no recordaba bailar así, por lo menos desde mi época juvenil. Ella no sé, pero yo estaba muy excitado, no pensaba acabar la noche con nadie. Pero ya no podía aguantar más.

Llegamos a un acuerdo rápido, para pasar al reservado que tenían detrás del cortinaje del fondo de la pista de baile y entramos.

No hubo flores......solo SEXO.

sábado, 28 de abril de 2012

CONCURSO RELATO ERÓTICO 2012 - RETALES LITERARIOS - CUMPLEAÑOS

                                                     CUMPLEAÑOS

Querido amigo, ayer fue mi cumpleaños y hoy estoy en un hospital escribiendo con la única mano sana y libre que tengo, pues el resto o está escayolado o con vendajes. Pensaba haber pasado un día muy especial y con mucho sexo y lo único que noto en mi miembro es la sonda urinaria, uretral o de Foley.

Me molesta mucho y esta mañana cuando ha venido la auxiliar, que qué mala suerte tenía bigote y muchos más años que yo, se lo he dicho y ella me la ha cogido sin miramientos y me la ha lavado con jabón que escocía y me decía que era para quitar el barrillo que se queda en el reborde de la sonda. La muy puta, he estado por decirla que se quitara el barrillo que tenía ella en los belfos con piedra pómez.
Sabes que hace unos meses dejé de salir con mi novia y desde entonces no había vuelto a acostarme con ninguna chica, así que las ganas eran que ni te cuento.
 Entonces pensé en hacerme un regalo en mi día y contacté con un teléfono del País, en donde se ofrecía una chica joven, liberal con pechos turgentes, universitaria y con varios idiomas, me parece que francés, griego y no sé si búlgaro.
Me mandó foto por correo electrónico después de darle mi número de tarjeta del banco y realmente era espectacular, yo creo que era Heidi Klum, sobre todo, porque lo que me iba a costar.
Contraté un servicio completo en mi domicilio con comida y luego toda la tarde, así que me arreglé y salí a la tienda del gourmet de la esquina y no me corté para nada, un buen cava reserva, vino blanco, bueno dos, caviar, almejas vivas, cigalas y langostinos de Denia.

Para después, ya tenía en casa para las copas.
Luego me fui a una tienda que conocía, Canela en polvo y compré aceites, geles excitantes, velas olorosas afrodisíacas y unos aparatitos eléctricos, vibrador y un huevo con mando y un anillo constrictor para mí.
Cambié las sábanas y puse unas de raso.
 Coloqué por todas partes las velas y también seleccioné la música, la más calentona que tenía tipo chill-out y varias versiones del je t’aime moi non plus.
Con tanta preparación me excité y tuve que aliviarme, pues no era de recibo que con lo que me iba a costar el evento actuara como un joven en su primera vez y tuviera una eyaculación precoz.

Me abrí una botella de un albariño que tenía fresquito, mientras empezaba a preparar en la cocina el menú e iba picando de aquí y de allá y no sé si sería por las tres o cuatro copas que llevaba o por el afrodisíaco del marisco, que me tuve que aliviar otra vez.
Puse una mesa preciosa con velas, la hora se acercaba y yo estaba de lo más nervioso.
Sonó el timbre y pegué un respingo del susto, cogí el telefonillo y venga a gritar, quién es, diga, diga y ya de repente, oigo golpes en la puerta. Estaba detrás de la puerta, tonto de mí, me quité el delantal y abrí.
No era Heidi, pero se parecía, impresionante, me quedé parado en medio de la puerta y al rato me empujó suavemente, me besó en la mejilla y me dijo que si quería hacerlo en el descansillo. Nos reímos y cerramos la puerta.

Era además de muy guapa, muy simpática y disfrutamos de la comida. El alcohol empezó a surtir efectos y a los postres y con las copas ya nos habíamos contado nuestras vidas varias veces.
Llevaba una ropa muy sexy y ajustada y me puso como un burro y con la excusa de ir al baño me alivié por tercera vez, como las negaciones de San Pedro.
Pasamos al salón y con las copitas y la música lenta, bailamos agarrados un buen rato y le comenté que antes de pasar a la cama tenía medio preparado un baño en mi bañera redonda. La encantó pero me dijo que en su casa tenían la costumbre de esperar dos horas entre la comida y el baño.

Cuando se acercaba la hora fui al baño y comencé a llenarla, pues tarda un montón por lo grande que es. Eché los geles y coloqué los adminículos en la repisa de la bañera, y encendí las velas.
Volví al salón por ella y se había quedado dormida en el sofá, me costó despertarla y los dos sujetándonos mutuamente nos dirigimos al dormitorio. Yo que me había imaginado un streptease maravilloso, pues no, cada uno se quitó la ropa como pudo, dejándola tirada por el suelo.
Reíamos y aplaudíamos mientras no metíamos en la bañera, sin mirarnos siquiera y empezamos a salpicarnos como niños. A pesar de todo me excité y quise tomarla, pero sería por el exceso de gel que se me escurría o por la cogorza que teníamos que comenzamos a girar en un baile frenético como en una feria.
La sonrisa se nos borró de la cara y en uno de los giros los aparatos eléctricos se cayeron dentro, a mí me dio un calambre del quince y al querer rescatarla se me escapó de los brazos y salió volando hacia las cortinas volcando las velas e incendiándose.

Salí como pude pero como estaba todo enjabonado me deslicé sin freno a por la tele de plasma que cayó con estrépito, rompiéndose en mil pedazos.
Nunca había llenado la bañera tanto y sería por eso o porque la ley de Murphy se cumple inexorablemente, que el suelo se abrió y caímos al dormitorio de los vecinos que estaban durmiendo la siesta, ella encima del armario.
Recuerdo estar tumbado en el suelo, desnudo con el pito tieso y los vecinos mirando con la boca abierta.
Y aquí estoy, en el hospital con un año más, y arruinado, pues el seguro dice que no está cubierto y mi Heidi me ha demandado por daños físicos y morales.

martes, 24 de abril de 2012

2ª EDICIÓN RELATO BREVÍSIMO MANDARÍN - 2012 - ¿...................?

                                                       ¿...................?



-¡Hola! ................... ¡eh!..................te estoy hablando a ti .......  ¿estás leyendo esto?.....pues entonces es a ti.
-¿Estás solo?......................mira detrás ,....................................estoy contigo, no notas mi presencia......................................no has notado en el cuello una pequeña brisa.................................ese soy yo.

-Por favor baja un poco el foco que me molesta, .......................mis ojos ya no son lo que eran, .......no quiero importunarte, pero en mi dimensión los colores son demasiado brillantes.

-Estás pensando lo que yo, hace unos días, esto es una tontería y dejo de leer.
-NO,.........eso hice yo y ya no tengo solución, pero tu si.
-Vas a notar un escalofrío en la  espalda.............................................................¿ya?...................¿no?......................................relájate,    no, no, te estás poniendo tenso y así no puedo entrar en ti.

-No te preocupes, yo ya no soy ni masculino ni femenino, pero necesito poseerte........................¿me notas?..........................................sigue leyéndome por favor...................queda poco   ............ no, no, no, te resistes ,...................................................venga apaga la luz.............ya..............está....................................cierra el ordenador .................................................... y vamos a la cama.

2ª EDICIÓN RELATOS BREVÍSIMOS MANDARÍN - 2012 - EL RAVAL

                                                           
                                                                           EL RAVAL


                                                                                                                                                                           Llueve mucho sobre Barcelona y hace frío, una mujer  sale de la iglesia de Sant Agustí y se dirige hacia el carrer del Carme con el bolso en una mano y con la otra aferrando el paraguas.

Se dirige hacia el barrio gótico y en cuanto entra en sus calles empedradas el sonido de la lluvia adquiere  un volumen mucho más alto que asciende por los muros de piedra y produce ecos en todas las esquinas.
Es casi de noche y el frío cala los huesos, choca con un ciego al que tira al suelo, se vuelve y continua caminando, llegando a la Catedral.

Se parapeta en un saliente del muro, pliega el paraguas y espera.
Ve venir de lejos a una pareja, se pone tensa y cuando llegan a su altura saca un cuchillo del bolso y se lo clava a él en el pecho.

Se arrodilla y llora.

lunes, 23 de abril de 2012

CONCURSO MICRO - RELATOS NH HOTEL - 2012 - ESPAÑA - LA BRASILEÑA

                                                                      LA BRASILEÑA

-¿Recepción?, soy Olga Arellano de la 73, ¿Cuándo está prevista la llegada de Don Mario?, gracias.
Se va a enterar el muy pendejo, con lo meloso que se ponía llamándome “ la brasileña” y haciéndome carantoñas. Fue allá por el año 1973, pero desde entonces si te he visto no me acuerdo.
Llevo media vida , qué digo, toda la vida siguiéndole por todo el mundo y siempre llego tarde, pero en esta ocasión, estoy alojada en el NH donde él vendrá. Me estoy poniendo guapa, aunque creo que soy ya muy mayor y es posible que no me reconozca.

El muy huevón, toda la vida en los periódicos, en las televisiones con esa sonrisa, ay, qué sonrisa, ésa, esa fue la que me perdió.
He visto por los salones al poeta, al esclavo y al jaguar, a Zavalita y a Ambrosio, también a Urania y a Julia. Luego en el casino estaba Pichula Cuellar, Lituma y Roger, riéndose y jugando a la ruleta. Se va a liar parda.

Pero se lo tiene merecido, por echar hijos al mundo y luego abandonarlos a su suerte, a los hijos hay que cuidarlos siempre.