EMMANUELLE
Demasiados asientos vacíos para un vuelo low-cost, así que
mi nuevo amor y yo decidimos emular a
Emmanuelle, nos desnudamos y la mantita
por encima.
Me clavé en el culo un reborde picudo, de los reposabrazos
que no subían bien, grité, vino el azafato y le pedí una aspirina. Las mantas
eran pequeñas y se nos veían las carnes, pero para entonces todo nos daba
igual, entre los asientos, el de atrás con la mano por dentro del pantalón.
Un neceser cayó de las alturas impactando en la espalda de
ella y un gemido salió de su boca y dije
me voy contigo.
A punto estaba, cuando nuestro vecino delantero echó el
asiento para dormir y cayó sobre mi cabeza, otra aspirina.
Grita mi pareja y por delante acude el azafato con otra
aspirina y por detrás el carrito de las ventas se lleva la piel de mis piernas,
yo aúllo y pido otra.
Las líneas aéreas ya no son lo que eran en tiempos de Lindberg...
ResponderEliminarUn saludo
JM
Tienes razón Juan Manuel, quien no ha hecho el amor en un avión.
ResponderEliminarUn saludo
Ejem, mismamente yo, ¿qué pasa que soy una alienígena?.. Ni vosotros, tampoco.
EliminarMuy bien resuelto, Epi.
Estaba dándole vueltas (hace unos días cuando vi la convocatoria) a la frase por la que debe comenzar el micro y no se me ocurría nada, pero a ti te ha salido del tirón.
Felicidades, me quedo aquí en tu blog para vigilarte de cerca.
Un abrazo.
María, lo intenté pero lo sigo deseando y en un ascensor también pero cada día son más pequeños.
EliminarCreo que lo importante es seguir intentándolo, como en el deporte.
Un beso y gracias por pasar.
Es un sitio muy erótico , por aquello de estar por las alturas, y con vistas al cielo, que nas se puede pedir.
ResponderEliminarBesitos aéreos.( por cierto visité la página del concurso y es muy apetecible )
Puri
Puri, anímate es un concurso divertido y si te toca el viaje a París pues miel sobre hojuelas.
ResponderEliminarUn beso