FIESTA DE GRADUACIÓN
ENVIADO EN 22/01/2020 17:34
Eran las cuatro de la mañana y los recién licenciados en Derecho, destinados a proteger a los ciudadanos, hartos de copas por la celebración, hacía rato que habían entrado en total degradación.
Eran chicas y chicos de una gran diversidad económica y social, pero habían conseguido hacer un botellón sostenible, sin perjudicar al medio ambiente y sin poner en riesgo las posibilidades de desarrollo de las generaciones futuras, decían entre grandes carcajadas.
Pero lo que pensaban se fue al traste, pues el ecosistema que se formó en el charco comunitario de vómitos, afectó por lo menos a cuatro de ellos y a dos personillas de una generación futura.
A MIS AÑOS
ENVIADO EN 10/06/2019 18:09
He conseguido graduarme en Derecho a mis 63 años. Con el título, la orla y la beca, me he hecho un cartel que he colgado en mi despacho.
Casi le pongo una vela, me paso las horas muertas mirándolo, hasta que alguien de mi familia acude al rescate para que coma.
Y eso que los inicios en la Complutense no fueron fáciles, una profesora quería tuitear conmigo, yo le dije que de ninguna manera, de usted, me miró raro.
Del estumail, no quiero ni acordarme, me hice un lío con la contraseña, bloqueé varias computadoras y llegaron a decretar la prohibición de mi entrada en la sala de ordenadores.
Era el único de toda la facultad, incluido profesores, al que no se le veían los calzoncillos.
Fue llamativo, no sé si porque era el mayor del campus o porque dejaban de verme, que en la graduación, fui el más aplaudido.
POLÍTICO DE HOY DÍA
ENVIADO EN 30/07/2018 13:39
Quiero declarar, sufriendo la tortura del agua, que yo no fui al colegio. Todo es un engaño.
JUEZ RECTO
ENVIADO EN 18/05/2018 11:30
Justo en el primer día de la renovación del Tribunal Constitucional, donde he sido nombrado Juez electo por todos los miembros, incluso por las mujeres y me sucede este desastre, que será recordado hasta el infinito y más allá.
Tenía un eczema en el prepucio y en la farmacia me dieron una pomadita, me la apliqué con mimo, por el escozor y al rato, el dolor no solo era insoportable, sino que la cosa se empezó a alargar como cuando era joven y yo ya no recordaba. Las ampollitas explotaron. He leído el prospecto, he comprobado que no tenía corticoides y que es una especie de viagra en crema.
No me puedo poner el calzoncillo y en cuanto salga con la toga, como si llevara un tipi seminola debajo, me van a sentenciar como Príapo y me van a dar la carta de despido antes del acto de posesión.
BARRAGANERÍA
ENVIADO EN 17/04/2018 19:14
Voy a acudir al Alcalde del Rastro, para contarle la traición de mi esposo y le castigue con el látigo en la picota.
Se ha amancebado con la molinera y no solo me ha abandonado con tres criaturas, sino que sale a caminar por la plaza, con ropa elegante, pavoneándose con ella por delante de mi cabaña.
Yo y mis hijos, en la intimidad del hogar y con las ventanas cerradas a cal y canto, asistimos a su desfile sin saber qué hacer.
No digo que no fornique con quien quiera o quien se deje, pero si el Merino menor le abre expediente, le juzga y le condena a que lo haga sin escándalo y me mantenga como antes, pues miel sobre hojuelas.
Así me dejará en paz, pues con mi edad y tres hijos, prefiero que se empane con la harina de otro costal.
JUICIO DE FALDAS
ENVIADO EN 12/03/2018 17:50
No sé que baremo se ha seguido en este juicio de faltas, Señoría o si ha sido una concatenación de casualidades, pero condenar a la persona que estaba en el columpio en el parque es un despropósito.
Mi defendido se estaba balanceando a un ritmo pausado, tiene 77 años, su compañero de petanca, de la misma edad, le empujaba desde atrás y no tiene nada que ver que los dos sean ateos.
Es posible que la custodia le impidiera ver con normalidad al vicario o que se pisara el borde de la sotana, pero achacar intencionalidad a la colisión con los pies de mi defendido y considerar las palabras “Ahí va la hostia” una blasfemia es absurdo, no es vasco y además el ostensorio salió despedido, se abrió el viril y la sagrada forma voló como un auténtico frisbee.
TESTAMENTO OLÓGRAFO
ENVIADO EN 07/02/2018 10:49
Cuando mis hermanos me comunicaron la muerte de nuestro padre y la apertura de su testamento ológrafo, eché a correr por las calles del pueblo. La gente se asomaba a puertas y ventanas y a voz en grito me animaban a tener valor.
Yo sabía que tendría que litigar, pues mi progenitor no sabía ni leer ni escribir y por lo menos la legítima de la herencia me correspondería.
Iba saltando de un lado al otro del regato de agua sucia que bajaba por en medio de la calzada, cuando caí de rodillas por la fatiga.
En ese momento se oyeron varias detonaciones en el zaguán de mi padre y al entrar, vi los cuerpos de mis hermanos desmadejados en el suelo y el nacimiento de un arroyo rojizo, trastabillé, me apoyé en el quicio y mi pérdida, como un afluente, se unió para hundirse por el sumidero.
COHECHO DIOS MÍO
ENVIADO EN 17/01/2017 11:23
Cuando recibí la cesta de Navidad, todo fue albricias y parabienes, el primer regalo como abogado, aunque fuera de aquel cliente mal encarado y con ese tatuaje de la calavera en la cabeza. Me miraba fijamente y me decía que no me preocupara, que era inocente y los que le habían denunciado se iban a arrepentir, mientras crujía los dedos, así que conseguí librarle de la cárcel. Ya me dio mala espina cuando los demandantes sufrieron un accidente de tráfico y el fiscal apareció ahorcado de sus puñetas en el baño del Juzgado, pero el deber es el deber. Cuando rompí el celofán y fui colocando los productos en la mesa, la decepción fue en aumento, todas las fechas de caducidad eran de cuatro años para atrás y el jamón tenía un cierto olor a podrido.
VIBRATOR
ENVIADO EN 11/10/2016 12:14
Sr Juez, el fiscal me recomienda no testificar y que se produzca la inadmisión de la demanda contra la empresa “Dulces Movimientos”.
Entré en la tienda indecisa, pero cuando empecé a ver la variedad de artefactos mecánicos, en tamaños, longitud, grosor y textura, se me hizo la boca agua, bueno y en más sitios, perdón, Señoría, prosigo.
En la caja que compré en el Sex shop, un vibrador llamado “Nacho Vidal clonado”, ponía, que me llevaría al éxtasis solo con la puntita y sería por un fallo o porque el ultrasonido era de mucha intensidad, lo que me provocó fue una expulsión de piedras de la vesícula y la caída de dos empastes de amalgama.
No sé que hacer, mi abogado dice que desista, que me pueden cobrar por la litotricia vesical y que va a ser peor el remedio que el orgasmo. Lo van a patentar.
CAMPO DE BATALLA
ENVIADO EN 13/10/2015 11:40
Avancé con cuidado para no despertar al enemigo y atravesé la frontera, la oscuridad era casi total y rozando la pared con mis nudillos, me comenzaron a sangrar. Me detenía de vez en cuando, aguzando mis oídos, para atisbar cualquier sonido que proviniera de la zona enemiga, pensé que esto no era vida, mientras cogía sin hacer ruido unos víveres para volver a mi posición lo más raudo posible.
Encendí el camping gas y cené una sopa de sobre llena de grumos y un trozo de queso.
La guerra duraba ya tres meses y ninguno cedía un palmo de terreno, se había enquistado el conflicto y no había visos de ningún tipo de solución.
Ya había decidido solicitar asilo en un lugar de la costa mediterránea, cuando se me cruzó ese abogado que me convenció de que yo también tenía derecho a la vivienda, no aguanto más, mañana me rindo.
CUMPLEAÑOS
ENVIADO EN 17/09/2015 12:52
Fiesta sorpresa de cumpleaños mi amor, catering de sushis para cuarenta y paquete de animación con fuegos artificiales y mascletá con un ahorro del cincuenta por ciento.
La barra libre genial, todos borrachos y desnudos en la piscina, nuestro abogado haciendo el Manneken Pis en el trampolín. Jugar a las carreras con nuestras morbideces al aire, un corte, pero divertido.
Todo perfecto, cariño, hasta que me quitaste el móvil, tus amigas tocándome los hiphones y lo de la estrella fugaz ha sido una pasada, once se han quedado para la ídem, cuatro o se han ido o se han volatilizado y el jurídico no hay manera de que reaccione, solo se mira el lugar en donde tuvo su pito y solloza.
Habrá que peritar los daños producidos en nuestro refugio y la responsabilidad civil por daños a las personas nos va a llevar a la cárcel.
¡Ay, Epi!, ¡necesito leer esa carta! Me has creado una terrible necesidad…
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Una historia terrorífica, con niños como protagonistas y un gigante lúdico, que encierra un misterio. Con razón la muchacha no quería meterse ahí dentro. Sin embargo, no todo es tan espeluznante, la carta de la hermana desaparecida suaviza el drama, aunque aviva el misterio para el que surgen muchas preguntas: ¿Cómo le fue? ¿Dónde fue a parar?
Una historia gigantesca que deja con ganas de más.
Un abrazo y suerte, Epi
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No creo que haya otro relato que me guste más. Tus textos suelen hacerme gracia siempre; este me ha cautivado.
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La carta no se dónde estará, pero el Tío Tragaldabas y la Tía Melitona, que tantos niños han digerido (a mí incluido) durante décadas, podéis verlos aquí:
https://www.google.com/search?q=la+tia+melitona+valladolid&client=ms-android-vivo-rvo3&prmd=imnv&sxsrf=APq-WBvsh3IxmIOAOcFInIQAasx3tc5Eyg:1645046559334&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=2ahUKEwjM4Lr-k4X2AhW4hP0HHVs5CvYQ_AUoAXoECAIQAQ&biw=384&bih=724&dpr=1.88#imgrc=jLXEGS0sDkpqyM&imgdii=C8yT1oPk7VX3qM
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Lo que empieza con un relato de un juego que todos conocemos de nuestra infancia, pasa a tener ese punto trágico con la desaparición de la niña y luego esa carta misteriosa…
Sólo falta un
Continuará…..
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Rosalía, Rosalía
tú lo tienes que saber,
Pues no, lo anterior es de una canción de Cuerpos y Almas.
Tengo la carta sin abrir encima de la mesa.
Un beso.
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Angel, gracias por tu comentario. Eran gigantes para nuestro tamaño.
Un abrazo.
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Edita, cautivado me dejas a mi.
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Rafa, en mi infancia pucelana era el tragaldaba, las marionetas y el barquillero.
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Luz, en la cama te cuento un cuento….
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Deduzco que ahora eres cuñado de Tragaldabas. Muy bueno, Epi.
Un abrazo y suerte.
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Mi padre solía decir que eras un tragaldabas cuando comías deprisa y casi sin masticar, cuando todo te venía bien y no reparabas en si había o no que compartir. Es muy chula tu historia y…¿la carta traía explicaciones?
Un saludo y feliz finde, Epi.
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Creo que soy yo Rafa jaja
Un abrazo.
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Mercedes, era el uso coloquial del glotón.
En Valladolid ya no aparece.
Un beso.
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Un relato genial, Epi. Recuerdo haber visto ese gigante tragón hace tiempo, en algún lugar. Nunca lo usé. Nunca le miré directamente a los ojos, creo. Ahora ya sé porqué. Me ha encantado como has ido acercándote y lo bien que todo está descrito. Maravillosa historia. Suerte y abrazos.
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